Frédéric Chopin compuso su Rondó en mi bemol mayor (a veces denominado "Introducción y Rondó"), op. 16, en 1833. Fue su cuarto rondó en general y estuvo dedicado a Caroline Hartmann. Se ganó un lugar en el repertorio del piano clásico como una pieza compleja y desafiante. Una representación media de esta obra dura alrededor de 10 minutos.