Frédéric Chopin escribió sus tres Valses para piano solo, op. 34, en los años 1834 a 1838. Fueron publicados en 1838 con el título Grandes Valses Brillantes, pero hoy en día ese sobrenombre suele reservarse al Vals en mi bemol mayor, op. 18. Chopin había estado escribiendo valses desde 1824, una década antes de esta serie en particular, aunque al no los consideraba una forma de arte seria. De hecho, a principios de siglo hubo una controversia sobre el vals como forma de danza, que provocaba mareos en los bailarines y permitía a hombres y mujeres compartir un abrazo íntimo en público. Los valses de Chopin, sin embargo, eran una especie de música artística destinada a un público sentado y, aunque respetaba la forma tradicional, a menudo la embellecía.
Frédéric Chopin escribió sus tres Valses para piano solo, op. 34, en los años 1834 a 1838. Fueron publicados en 1838 con el título Grandes Valses Brillantes, pero hoy en día ese sobrenombre suele reservarse al Vals en mi bemol mayor, op. 18. Chopin había estado escribiendo valses desde 1824, una década antes de esta serie en particular, aunque al no los consideraba una forma de arte seria. De hecho, a principios de siglo hubo una controversia sobre el vals como forma de danza, que provocaba mareos en los bailarines y permitía a hombres y mujeres compartir un abrazo íntimo en público. Los valses de Chopin, sin embargo, eran una especie de música artística destinada a un público sentado y, aunque respetaba la forma tradicional, a menudo la embellecía.