Arturo Cuccoli fue un violonchelista italiano. Cuando sólo tenía seis años, aprendió de su hermano mayor Egidio los conceptos básicos de la música y empezó a tocar el violonchelo. Luego, tras un período de inactividad debido a diversas enfermedades, empezó a estudiar en la escuela del famoso violonchelista Francesco Serato. A los dieciocho años inició una intensa carrera musical, que le llevó a tocar en diversas orquestas, donde adquirió una rica experiencia. Vivió en América y se unió a la orquesta de Río de Janeiro. De regreso a Italia, fue contratado primero en Bolonia y luego en Nápoles. Luego realizó una gira por la Península Ibérica y, brevemente, por segunda vez en América. Con apenas veinte años entró en el panorama concertístico como solista, siendo aplaudido en diversas ciudades italianas y en Montecarlo, para luego convertirse en violonchelista principal de la orquesta Sonzogno, y finalmente, conseguir el mismo papel en el teatro de Trieste, donde interpretó Llegó en 1893. Todavía encontró la manera de ir a Alemania y Rusia, y tocar en el trío Nachtigall de Varsovia.