"Danse Macabre, compuesta por Camille Saint-Saëns, pero transcrita para piano solo por Franz Liszt en S.555, es una pieza inquietantemente fascinante que lleva a los oyentes a un emocionante viaje a través del reino de lo macabro. El título en sí se traduce como 'Danza of Death", y esta representación musical de una leyenda medieval es a la vez espeluznante y cautivadora.
Al abrirse con un encantador pero amenazador solo de violín, la composición se lanza rápidamente a un torbellino de energía diabólica. La intrincada transcripción para piano de Liszt captura la riqueza orquestal del original. composición, utilizando pasajes virtuosos y contrastes dinámicos para evocar la atmósfera
de la fatídica danza.1 Hay una urgencia inquietante en toda la pieza, mientras Liszt maniobra hábilmente entre pasajes oscuros e inquietantes, entremezclados con momentos de respiro y delicada belleza. , impulsado por octavas frenéticas y escalas rápidas, crea una innegable sensación de perdición inminente.2 Danse Macabre es un testimonio tanto de la destreza de la composición
de Saint-Saëns como de la hábil interpretación de Liszt para piano solo. Sus escalofriantes armonías y evocadoras melodías transmiten poderosamente la espeluznante historia de la Muerte convocando a los muertos desde sus tumbas para bailar hasta el amanecer.
Con su intensidad dramática y su emocionante narrativa musical, Danse Macabre continúa cautivando al público, ofreciendo una experiencia inmersiva en el escalofriante mundo de lo sobrenatural".
