La fantasía en C, op. 15 (D 760), también conocida como Wanderer Fantasy, es una pieza de cuatro movimientos para piano solo, compuesta por Schubert en 1822. Considerada ampliamente como su obra más exigente desde el punto de vista técnico, Schubert fue citado haciendo referencia a su propia incapacidad para tocarla correctamente. Esta obra no sólo supone un formidable desafío técnico, sino que destaca en términos de estructura: cada movimiento fluye hacia el siguiente, cada uno comenzando con una variación de la frase inicial de su propio Der Wanderer lied. El compositor húngaro Franz Liszt, fascinado por la Fantasía del vagabundo, la transcribió para piano y orquesta (S.366) y dos pianos (S.653). Además, editó la partitura original y añadió varias interpretaciones en ossia, e hizo una reorganización completa del movimiento final (S.565a).