Joseph Haydn escribió su Concierto para trompeta en mi bemol mayor en 1796. Es una pieza en tres movimientos, y la dedicó a su amigo Anton Weidinger, quien había desarrollado una trompeta mejorada que podía tocar cromáticamente en todo su registro. Dado que los instrumentos de metal natural eran la norma, esto representó un avance importante. Sin embargo, el invento de Weidinger no tuvo éxito y las trompetas naturales se utilizaron hasta la década de 1830, cuando se produjeron por primera vez instrumentos de válvulas. Además de la trompeta con llave, la partitura requiere una orquesta de 2 flautas, 2 oboes, 2 fagotes, 2 trompas, 2 trompetas naturales y timbales.
Joseph Haydn escribió su Concierto para trompeta en mi bemol mayor en 1796. Es una pieza en tres movimientos, y la dedicó a su amigo Anton Weidinger, quien había desarrollado una trompeta mejorada que podía tocar cromáticamente en todo su registro. Dado que los instrumentos de metal natural eran la norma, esto representó un avance importante. Sin embargo, el invento de Weidinger no tuvo éxito y las trompetas naturales se utilizaron hasta la década de 1830, cuando se produjeron por primera vez instrumentos de válvulas. Además de la trompeta con llave, la partitura requiere una orquesta de 2 flautas, 2 oboes, 2 fagotes, 2 trompas, 2 trompetas naturales y timbales.